23.12.2013 - VALLADOLID

Uno de los niños de la orquesta 'In Crescendo', primer gitano que ingresa en el Conservatorio de Valladolid

Juan de Dios Ramírez Heredia, padrino de la orquesta, con algunos de sus integrantes en su reciente visita al colegio Allué Morer (Anabel Torres)

Uno de los integrantes de la orquesta infantil 'In Crescendo', proyecto del área socioeducativa del Centro Cultural Miguel Delibes amparado por la Orquesta Sinfónica de Castilla y León, se ha convertido en el primer gitano que ingresa en el Conservatorio de Valladolid.

Se trata de Carlos de la Fuente, chelista de la joven orquesta. De este modo el joven integrante de 'In Crescendo' compatibiliza ahora su trabajo en el colegio con seis horas semanales de Conservatorio.

Con un "el que algo quiere, algo le cuesta". Carlos asegura que su nuevo reto es duro porque hay que estudiar mucho aunque, pareciera querer decir, todo vale para progresar en el camino de la música, "una alegría, un sentimiento de vivir" del que él ya disfrutaba en su casa, con su familia, pero con sabor flamenco y no clásico.

 

El apoyo familiar

Para el director de la orquesta, Benjamín Payen, Carlos es afortunado por contar con el apoyo de sus padres, que han posibilitado con su consentimiento que el joven, que siempre quiso tocar y que es bueno -"no una estrella"-, se presentara a las pruebas de acceso del Conservatorio.

Tampoco su madre, Victoria Motos Jiménez, oculta la satisfacción que le produce tanto el hecho de que su hijo pueda estudiar en el Conservatorio como que sea el primer gitano que lo hace. "Es dar un paso adelante: esto es una novedad para los gitanos pero es para bien... para que vean que también podemos hacer otras cosas, como los demás".

 

Los niños de ‘In crescendo’ después de una actuación en la escuela (Anabel Torres)

Para el colegio, "lo más espectacular"

La alegría por el ingreso de este joven en el Conservatorio es palpable también en su colegio, el Allúe Morer, que hace casi tres años recogió el testigo lanzado por la Orquesta Sinfónica de Castilla y León para trabajar con sus chicos, mayoritariamente gitanos e inmigrantes, y comienza a recoger ahora los frutos de aquella apuesta.

"Es lo más espectacular que nos ha pasado... aunque no sabíamos cómo saldría, es algo tremendo", confiesa la directora del centro, Henar Rubio, quien contactó con la Federación de Asociaciones Gitanas de Castilla y León, que este año sufraga el alquiler del violonchelo con el que Carlos aprende en el Conservatorio.

 

(20 minutos)

Volver