29.12.2006 / Ignacio Jiménez Bermúdez será el nuevo ‘gitano de respeto’ de la provincia leonesa. Después del Tío Caquicho, el ‘arreglador’ que rigió durante años los designios de los gitanos, el nuevo en mantener el bastón de mando afronta su nueva etapa con el ejemplo de su predecesor en el cargo como aval y la meta de la progresiva inserción social como objetivo.
   Conoce a todos los gitanos de la provincia, que saben que “como dejó bien enseñado el Tío Caquicho, no se van a permitir los actos delictivos”, aunque reconoce que no tiene “una varita mágica”. Jiménez quiere dejar claro ante toda la comunidad “la labor social que hay que hacer de inserción”, camino que ya recorrió el Tío, del cual Jiménez fue asesor en algunas ocasiones. “Para igualarlo será muy difícil porque participaba donde se le solicitara y tenía una experiencia muy reconocida ante las autoridades, gracias al respeto que forjó entra payos y gitanos”.
   Para llevar a cabo esta labor, el nuevo líder apunta que son importantes las reuniones entre todos los gitanos para poder precisar consejos y rectificar cualquier conflicto. Para eso ha sido designado, para escuchar y para mediar.
   Jiménez explica que el cargo es “una satisfacción personal, pero también una alta responsabilidad ante el futuro” de los 3000 gitanos que viven en la provincia. (De Diario de León)