12.03.2007 / El Consejo de Ministros celebrado el pasado 9 de marzo autorizó, a propuesta de la Ministra de Cultura, Carmen Calvo, la creación de la Fundación Instituto de Cultura Gitana. Esta Fundación, que ya había sido anunciada con motivo del 8 de abril del pasado año, tiene la finalidad de desarrollar y promocionar la historia, la cultura y la lengua gitanas en todas sus manifestaciones y difundir su conocimiento a través de estudios, investigaciones y publicaciones. También se incluye entre sus objetivos principales promover iniciativas que conduzcan a la integración de la comunidad gitana desde el reconocimiento de su identidad cultural.
600.000 euros de presupuesto
Para su primer año de vida, los Presupuestos Generales del Estado del 2007 contemplan una aportación del Ministerio de Cultura de 600.000 euros, destinados a la creación de la Fundación y el inicio de sus actividades y funcionamiento.
El Instituto de Cultura Gitana se configura como una fundación del sector público estatal, con personalidad jurídica propia y plena capacidad para obrar, que actuará al amparo del Protectorado de Fundaciones del Ministerio de Cultura.
La creación de esta Fundación se lleva a cabo en cumplimiento de una Proposición no de Ley aprobada por unanimidad por el Congreso de los Diputados el 27 de septiembre de 2005, en la que se instaba al Gobierno a promover la cultura, la historia, la identidad y la lengua del pueblo gitano.
Los Estatutos de la Fundación constan de 27 artículos distribuidos en cinco capítulos, en los que se regulan las normas correspondientes a la constitución de la Fundación, naturaleza, domicilio y ámbito de actuación, fines, objetivos y beneficiarios, gobierno, régimen económico y modificación.
Gobernado por un Patronato
El órgano de Gobierno y representación de la Fundación Instituto de Cultura Gitana estará compuesto por un presidente, que será la ministra de Cultura o la persona en quien ella delegue; un vicepresidente, elegido por el patronato entre sus miembros; un secretario, que será el director del Instituto, y un máximo de 15 patronos. El patronato podrá designar, con el fin de llevar a cabo fines fundacionales, un comité delegado, que podrá estar integrado por miembros del patronato y terceras personas.
Entre sus fines principales destacan la proposición de acciones dirigidas a lograr la convivencia armónica entre los distintos grupos y culturas que conforman nuestra sociedad, en las que se tenga en cuenta la igualdad de oportunidades, la igualdad de trato, la igualdad de género y la no discriminación de la población gitana.
“Un gran día para la cultura española y para el pueblo gitano”
Tras la aprobación del Instituto de Cultura Gitana por parte del Consejo de Ministros, el secretario de Movimientos Sociales y de Relaciones con las ONG del PSOE, Pedro Zerolo, consideró que era “un gran día para la cultura española y para el pueblo gitano”. Zerolo señaló que el Gobierno “cumple de nuevo sus compromisos con los ciudadanos y, en este caso, con la comunidad gitana española, que verá reconocida e impulsada su cultura, que es una parte fundamental de la identidad cultural de toda la ciudadanía española”.
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