29.11.2011

Condenados a tres meses de cárcel los padres de una menor por absentismo escolar reincidente

Acabamos de leer la noticia ampliamente difundida por Europa Press. Y porque la consideramos de gran importancia nos apresuramos en ponerla en conocimiento de todas las Asociaciones Gitanas de España, así como de todos los gitanos y gitanas que mantienen relación con la Unión Romaní.

El Juzgado de lo Penal de Cádiz ha condenado a tres meses de cárcel a los padres de una menor de Chiclana de la Frontera (Cádiz) por no obligar a su hija a ir a la escuela.

Se trata de una sentencia que recae sobre unos padres con conductas absentistas reincidentes durante varios cursos escolares ya que el Centro Educativo de Primaria detectó la continua falta de asistencia de la menor sin ningún tipo de justificación.

La sentencia recoge que los hechos declarados y probados son legalmente constitutivos del delito de abandono de familia por lo que el magistrado ha declarado a los progenitores como autores criminalmente responsables de dicho delito. Han sido condenados a tres meses de prisión con inhabilitación del derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena.

Esta sentencia se convierte en la décima que un órgano judicial emite como consecuencia de conductas absentistas por progenitores de menores empadronados en la localidad gaditana, lo que demuestra, según la edil de Educación, que "el camino de trabajo que se va tomando es el correcto y que el amplio clima de cooperación en la lucha por las conductas absentistas están logrando la plena matriculación de todos los alumnos de la localidad, proporcionándoles así la educación y la formación que se merecen y les corresponde".

Nosotros pedimos a todos nuestros amigos, parientes y asociados que difundan ampliamente esta noticia en nuestros barrios y entre nuestra gente. Desde la Unión Romaní siempre hemos dicho que la cultura y la formación son las mejores herramientas para defender a nuestro pueblo y para hacer válidos los derechos que como seres humanos nos corresponden. De ahí que nuestros mayores esfuerzos estén encaminados a garantizar que ni un solo niño o niña gitanos dejen de ir a la escuela.

El convencimiento de esa realidad debería ser suficiente para que los padres de los menores hicieran todo cuanto esté a su alcance para que sus hijos no falten sin causa justificada ni un solo día a la escuela.

Manuel García Rondón

Secretario General de Unión Romaní