21.05.2013

ENTREVISTA A MANUEL BUSTAMANTE:
"Muchas de las cosas que he conseguido no hubieran sido posibles sin el apoyo del movimiento asociativo gitano"

Manuel Bustamante lleva desde el año 2000 ejerciendo como diputado en las Cortes Valencianas y durante todos estos años, su voz gitana ha trasladado al Parlamento de la Comunitat Valenciana las aspiraciones y reivindicaciones de la comunidad rromà. Actualmente, Manuel Bustamante es el único gitano en toda España que ostenta un escaño como parlamentario.  

Hace apenas unos meses usted a vuelto a convertirse en el único diputado gitano que ahora mismo está en activo en la política española, en este caso en el Parlament de Valencia. ¿Qué representa para usted este honor? 

"Representa lo que usted bien dice en su pregunta, un gran honor y una gran responsabilidad. Al mismo tiempo tristeza, tristeza por ser el único diputado de etnia gitana, teniendo tantos gitanos y gitanas que podrían estar ocupando el mismo puesto en diversas comunidades autónomas y en el Congreso de los Diputados. Es incomprensible que en Andalucía, que prácticamente tiene una población de las tres cuartas partes del pueblo gitano, no tengamos ningún gitano o gitana ocupando puestos de diputados o cargos de responsabilidad".

Como decíamos, el suyo es un caso excepcional. ¿Por qué cree que habiendo gitanos en las listas de muchos partidos, después nunca llegan a ejercer como parlamentarios? 

"En algunos casos, porque su inclusión en las listas quizás vayan en puestos que es imposible o muy difícil llegar ese partido político a ese número de escaños. Esto nos hace pensar que algunos partidos políticos nos utilizan como reclamo para conseguir más votos, en este caso, del pueblo gitano".

¿Cree que la clase política española no está preparada para asumir las diferencias étnicas que sí se dan en la sociedad?

"No, la clase política sí está preparada para asumir las diferencias étnicas a las que usted alude. Yo he sido diputado la 5º, 6ª, 7ª y 8ª legislatura y no me he sentido discriminado por mi condición de gitano. En el año 99 lo que sí me propuse con mayor o menor brillantez oratoria, fue demostrar que una persona gitana puede desarrollar su trabajo parlamentario como cualquier otro. En estos doce años he pertenecido prácticamente a todas las comisiones del Parlamento Valenciano, destacando haber sido secretario de la Comisión de política social y empleo, vicepresidente de la Comisión de dependencias, vicepresidente de la Comisión de derechos humanos, secretario de la Comisión especial de estudio de las técnicas y de las actuaciones para mejorar el rendimiento escolar y las posibilidades de empleo de los jóvenes, entre otras".

Su papel como gitano y parlamentario supone también una responsabilidad para con su pueblo. ¿Los gitanos valencianos le comunican sus inquietudes para que usted ejerza de portavoz de la comunidad?

"Por supuesto que me indican sus inquietudes para que las reivindique o las traslade a donde sea pertinente. Como portavoz en algunos casos, y en otros afortunadamente no, porque el movimiento asociativo gitano quiere ser el protagonista de su destino y no ser sujetos pasivos y que sean otros los que decidan por nosotros. Personalmente, muchas de las cosas que he conseguido no hubieran sido posibles sin el apoyo del movimiento asociativo gitano".

Aunque los gitanos valencianos gozan de un alto grado de inclusión social, ¿cuáles son los problemas más graves a los que se enfrentan actualmente: vivienda, salud, educación...?

"Creo que como el resto de gitanos/as en España, el primer problema es el trabajo, estamos en una sociedad muy competitiva, de hecho se ha pasado de la era del arado a la era del ordenador. Mientras más preparados estén nuestros jóvenes más oportunidades tendrán para la inserción laboral. No olvidemos que la mejor política social es el trabajo y el primer paso a la desestructuración familiar es el desempleo. En segundo lugar, la educación. Un pueblo sin educación nunca será un pueblo libre".

Esta es una nueva legislatura en la que usted es diputado por Valencia. Con su presencia en el Parlament de Valencia ¿cree que las instituciones valencianas están más sensibilizadas con las necesidades de los gitanos?

"La cultura gitana es una gran desconocida en España. Mucha gente confunde lo que es la subcultura que genera la marginación con lo que es la cultura gitana, y no tiene nada que ver. Esto hace que la Administración a veces tome decisiones equivocadas y la figura del gitano en la toma de decisiones sea fundamental para que las instituciones estén sensibilizadas. ¿Por qué quién conoce mejor a un gitano que otro gitano?

En cuanto a las asociaciones gitanas valencianas, ¿juegan un papel destacado a la hora de desarrollar políticas de inclusión?

"La aportación de las asociaciones gitanas es fundamental, y por supuesto, son ellos los que presentan sus iniciativas y reivindicaciones y las llevan a cabo. Yo he sido, soy y seré parte del movimiento asociativo gitano y es una de las cosas de las que más orgulloso estoy. Sobre todo, de haber aprendido mucho de gitanos mayores como el “tío Juan Roige Roige” hombre y gitano entrañable y en paz descanse del tío Juan Vargas, llamado cariñosamente el Tío Medaña".

Usted es diputado por el Partido Popular. A grandes trazos, ¿qué cree que ofrece su partido a la población gitana?

"Durante todos estos años, sobretodo diálogo. Y nosotros creemos que cuando existe el diálogo el 50% de un problema está resuelto. Respuesta a nuestras reivindicaciones, en algunos casos positiva y en otras negativa, pero siempre una respuesta. Personalmente creo que lo que peor le puede pasar a cualquier colectivo es que se le ignore".

Son tiempos difíciles y los políticos hoy en día no gozan de la popularidad de antaño. ¿Qué debería hacer la clase política para volver a ganarse la confianza del pueblo?

"Aunar esfuerzos todos los partidos políticos para sacar a España de la grave situación en la que se encuentra. Más proximidad con el ciudadano, sobre todo con los que están en riesgo de exclusión social".

Silvia Rodríguez Gómez