12.11.2013 - FRANCIA La ministra de Justicia denuncia la deriva racista de la sociedad francesa | |
La ministra de Justicia francesa, Christiane Taubira, ha lanzado este miércoles su propio ‘Yo acuso’ en una entrevista que publica el diario Libération. Después de ser comparada con un simio en la página de Facebook de una candidata del Frente Nacional, luego apartada del partido, y de ser llamada gorila y mono por algunos niños que se manifestaban contra el matrimonio homosexual en Angers (Maine y Loira, oeste del país), Taubira ha afirmado que “esos ataques racistas son un ataque al corazón de la República”, ha añadido que ponen en peligro la cohesión social, y ha mostrado su sorpresa porque “nadie haya elevado con claridad su voz para alertar de esta deriva de la sociedad francesa”. Nacida en Cayena, Guayana francesa, Taubira se pregunta si una “sociedad cuyos cimientos se tambalean” será capaz de reaccionar, y afirma que la respuesta a los insultos y al racismo de la extrema derecha “no ha estado a la altura”. “Las conciencias de la sociedad francesa podrían haber dicho: ‘cuidado, esto no es superficial, es una alarma. Es la cohesión social lo que está en juego, la historia de una nación lo que se pone en cuestión”. Según Taubira, “las inhibiciones están desapareciendo y los diques caen”, y “hace falta recordar que el racismo no es una opinión, es un delito. La respuesta judicial es indispensable, aunque no basta. No podemos pedir a la justicia que repare las patologías profundas que minan la democracia. Yo estoy acostumbrada a los insultos, pero millones de personas son cuestionadas cuando me llaman mono. Millones de chicos saben que en el patio del recreo les podrán llamar simios”. La Fiscalía de París ha abierto una investigación sobre los insultos de la excandidata del Frente Nacional, y el partido a su vez ha denunciado a Taubira por haber replicado que el pensamiento del FN “es los negros en las ramas de los árboles, los árabes al mar, los homosexuales al Sena y los judíos al horno”. La ministra no ahorra tampoco críticas a la actitud de la derecha sarkozysta (“menos republicana de lo que fue”) y a su propio compañero de Gabinete, el ministro del Interior, Manuel Valls, al que no cita, por sus ataques contra los gitanos. “Periódicamente, y otra vez durante el último quinquenio, construimos un enemigo interior. Los que son incapaces de dibujar un horizonte pasan el tiempo diciendo al pueblo francés que está acosado, asediado, en peligro. Pero si miramos las cifras de la inmigración, ¡es preciso dejar de hacer ese folletón diario! ¿En qué es un problema la imigración? ¿Qué peligro supone para la sociedad francesa?”. Sobre la controversia creada en torno a los 17.000 romaníes europeos que viven en Francia, Taubira se lamenta: “¡Hace un año que se discute sobre ellos prácticamente todos los días! Y se sigue diciendo a los franceses: ‘sois 67 millones, pero seguid poniéndoos un escudo en la cabeza porque estáis rodeados’, en lugar de poner en práctica respuestas eficaces. ¡Basta ya de manipular a una comunidad!”, exclama. El discurso político debe ser más claro, más decidido, debe estar mejor anclado históricamente y proyectado sobre el futuro”. |