02.12.2013 - OPINIÓN

Carta dirigida al periodista Miguel Ángel Marcos de Navalmoral de la Mata (Cáceres)

Por Adriana Ortiz Martínez

“Frente al racismo hay que militar”. Estas palabras del presidente de la Unión Romaní en el Estado español son las que me vinieron a la mente después de leer su noticia publicada el día 11 de noviembre de 2013 en el periódico Hoy Navalmoral de la Mata.

La noticia titulada “Un grupo de vecinos de etnia gitana saca del coche y agrede al conductor de un vehículo” encaja, desde mi punto de vista, en el contexto de gitanofobia que se está viviendo actualmente en Europa. Las expulsiones de ciudadanos gitanos en Francia no ha dejado impasible a nuestro país ya que hemos encontrado reacciones de ciudadanos y de instituciones.

Como lectora asidua del periódico, un mínimo de calidad espero. Necesité unas cuantas horas para digerir la noticia en la que el discurso xenofóbico es explícito. Entonces decidí escribirle esta carta, para que al menos, ante la impunidad, haya un eco de irritabilidad.

¿Por qué se ha de evidenciar una etnia, religión u orientación sexual en una noticia que, en teoría, busca la objetividad y la neutralidad? ¿Se trata acaso de un dato relevante para entender el contenido de la noticia? Soy consciente de que es tarea de los propios ciudadanos-lectores “desinfectar” las noticias y aislar los datos con objetivos politicos-sociales concretos, pero creo que en este momento en el que vivimos un aumento de la intolerancia hacia esta minoría, no nos podemos permitir titubear ante dicho fenómeno.

Su noticia consta de 4 párrafos de no más de 65 palabras cada uno y alude hasta 4 veces a la etnia de los que hasta el momento son presuntos agresores. Comienza el artículo con las palabras del Concejal de Tráfico y Seguridad Ciudadana, Pepe Pascual, con las que hace referencia a la civilización y la justicia. Me gustaría a mí preguntarle al señor Pascual qué entiende por país civilizado, si es que los hay, y preguntarle si un país que criminaliza a una minoría, por su condición de minoritaria, es civilizado. También hace referencia a la justicia. Quizá el Concejal y usted no conocen los casos de abusos, maltratos y asesinatos que llevan a cabo los cuerpos de seguridad en nuestro país en contra de ciudadanos indefensos.

Sin ir más lejos, hace menos de un mes, un ciudadano ha sido golpeado hasta la muerte en el Raval por parte de los Mossos de Esquadra. Esto sí es tomarse la justicia por su cuenta. Con la diferencia de que estos actos quedan completamente respaldados por las instituciones y por los medios de comunicación mayoritarios.

Debido a que hoy en día los medios de comunicación determinan la mayoría del conocimiento de los ciudadanos, se debería realizar un trabajo más cuidadoso y crítico con el fin de evitar fomentar actitudes racistas hacia una minoría. El carácter discriminatorio de su noticia es explícito, y que estemos acostumbrados a ello no significa que sea aceptado o esté normalizado. Es injusto. Es muy injusto que se abuse de esta forma injustificada de la asociación terminológica gitano-delincuencia creando un recurrente discursivo en la sociedad, obstaculizando por lo tanto la convivencia armoniosa de todos los ciudadanos.

Es posible que usted esté de acuerdo con estas palabras, y yo no pretendo ni mucho menos desestimar su trabajo, pero en ocasiones todos hemos agradecido un “feedback” para además contribuir a mejorar el diálogo entre todos los ciudadanos.

Le animo, por último, a considerar el Manifiesto de la IFJ (Federación Internacional de Periodistas). Quizá de esta forma aportaremos nuestro granito de arena en la ardua tarea de reducir el racismo y la exclusión social.