A continuación, les ofrecemos un fragmento de la entrevista realizada por EurActiv a Romeo Franz, candidato alemán del Partido Verde a las próximas elecciones europeas, que se celebrarán el próximo 25 de mayo. El candidato rromà ocupa el puesto 12 en la lista de su partido y pretende convertirse en el primer gitano alemán que ocupe un escaño en el Parlamento Europeo.

¿A qué problemas se enfrentan de manera diaria los sinti y rromà?

“Hay clichés y prejuicios profundamente arraigados que se están heredando en las familias alemanas. Actualmente, se le sigue diciendo a los niños: ‘Si no me escuchas, los gitanos vendrán y se te llevarán’. Las mujeres que visten largas faldas son retratadas como secuestradoras de niños pequeños. De la misma manera que se hizo durante el Tercer Reich, se está desarrollando el concepto diabólico del enemigo. Esta estrategia funcionó bien por aquel entonces y sigue funcionando hoy en día. Como resultado, tales prejuicios racistas se enardecen incluso a través de los medios de comunicación y la política”.

Pero, hace dos semanas, la Canciller Merkel anunció su intención de centrarse más en los derechos de los sinti y rromà. ¿Eso no le da esperanza?

“Para ser honesto, no. La señora Merkel solo intenta poner buena cara ante este asunto. Ya bajo la anterior coalición de cristianos demócratas y de social demócratas, el gobierno alemán era de la opinión de que no existían problemas en la integración de los sinti y los rromà. Como consecuencia, se bloqueó la ayuda financiera a los proyectos. Ahora, la señora Merkel lo único que quiere es compensar esto. Pero, al mismo tiempo, el gabinete de Merkel ha declarado a Bosnia y Herzegovina, Macedonia y Serbia, como países de origen seguros”.

¿Qué significa eso para los gitanos que viven en Alemania?

“El gobierno alemán ignora por completo la situación de los rromà. Simplemente, aquí ya no se nos quiere, ese es el mensaje. El gobierno alemán quiere que sea más fácil deportar a la gente de los países mencionados. Al mismo tiempo, la situación de los gitanos en Serbia es aún peor: no tienen acceso a agua potable, ni a la educación, ni a la asistencia sanitaria. Constantemente sufren ataques racistas. Su vida corre peligro. La política de Merkel es inhumana. La canciller alemana vende la idea de que hará lo que sea por los sinti y los rromà de Alemania. Pero sus acciones apuntan en una dirección completamente diferente”.

¿La adhesión de Rumania y Bulgaria fue prematura? ¿No se podría haber evitado el debate sobre la migración de la pobreza, que, obviamente, estimula la estigmatización de los sinti y los rromà?

“Durante las negociaciones para la adhesión a la Unión Europea, Rumania y Bulgaria se comprometieron a mejorar la situación de las minorías en sus estados. Pero hasta el día de hoy, esa promesa aún no se ha cumplido. Y la UE no les ha recordado esa promesa. Este es exactamente el problema: los derechos de los rromà en Rumania y Bulgaria no tienen prioridad en las conversaciones políticas. La adhesión a la UE se realizó para beneficiar a las empresas, en lugar en pro de los derechos de las personas”.

Entonces, ¿el debate sobre la migración de la pobreza en relación con los inmigrantes gitanos está justificado?

“No. Sólo el 10% de los rumanos y búlgaros que vienen a Alemania son gitanos. El 90% pertenecen a la sociedad mayoritaria. Sin embargo, también se está asociando a los sinti y rromà con la migración de la pobreza.

¿Cuál es la primera cosa que quiere abordar en el Parlamento Europeo?

“Quiero hacer que los derechos de los sinti y los rromà sean un asunto de relevancia. Quiero explicarle la situación en particular a los políticos que juegan un papel decisivo en la elaboración de la legislación correspondiente. Tenemos a 28 miembros en la Comisión y quiero sensibilizarles a todos ellos sobre el tema: y no solo sobre la situación de los sinti y rromà, sino también sobre los derechos de las minorías para los discapacitados, las mujeres y los homosexuales. Estoy a favor de una Europa para los pueblos, no para las empresas y los bancos”.

(Euractiv)