23.05.2014 - COMUNICADO

PERO, ¿HASTA DONDE VAMOS A LLEGAR?

Las manifestaciones del alcalde de Sestao deberían ocasionar su dimisión inmediata


Josu Bergara / TELECINCO

Desde la Unión Romaní pocas veces hemos pedido la dimisión de alguien. Dimitir es un recurso dialéctico desconocido para la clase política española. Y tiene su explicación. Algunos políticos españoles entienden que cuando acceden al poder lo es para siempre. Y entonces luchan, pelean y hasta delinquen por lograr que nadie les mueva de la silla. Para nosotros pedir la dimisión de un político o de cualquier autoridad es como lanzar alfileres a un elefante: ni se enteran. Nosotros preferimos denunciar públicamente los comportamientos deleznables de quienes se comportan como seres despreciables carentes de cualquier atisbo de humanidad o de conmiseración ante el dolor de los demás. Y, cuando las circunstancias lo permiten, hacemos todo cuanto está al alcance de nuestra mano para que los malos comparezcan ante la justicia y sean los tribunales quienes les condenen.

Todo lo que antecede lo decimos y lo hacemos con carácter general. Pero hay ocasiones en que nuestra voz ha de alzarse con toda la fuerza que nos da la razón y el coraje que nos inunda como víctimas propiciatorias del comportamiento despótico de quien nos ataca y nos insulta para decir a voz en grito una y mil veces: “¡¡DIMITA USTED, SEÑOR ALCALDE DE SESTAO!!”. Usted no puede decir lo que seguidamente reproducimos y continuar siendo el alcalde de su población:

 

"¿La mierda a Sestao? Pues no, la mierda ya no viene a Sestao, y si no la echo yo. La echo yo. Ya me encargo yo de que se vayan, a base de hostias, claro, pero ya me encargo yo de que se vayan. Porque la mierda nadie la quiere, porque todo el mundo les echa de todos los sitios. En todos los municipios, nadie quiere a los gitanos".

“Yo no voy a prohibir que venga gente extranjera porque es imposible, pero la gente que no quiere nadie, que no venga a Sestao. Gitanos buenos hay muy pocos”.

 

Estas declaraciones del alcalde de Sestao, Josu Bergara, (PNV) fueron grabadas de forma oculta durante una reunión con representantes de inmobiliarias de la ciudad para demostrar que el consistorio se negaba a empadronar a inmigrantes y gitanos. Y llegados a este punto debo manifestar que el comportamiento del Sr. Bergara no es en absoluto representativo del PNV, de quien hemos recibido a lo largo de los años pruebas de solidaridad y colaboración con nuestra causa. Es de justicia decirlo y así lo manifestamos. De la misma manera que esperamos que  los máximos dirigentes del PNV entiendan que un sujeto de esta catadura no debe representar a un partido de inspiración cristiana fundado hace 120 años.

El alcalde de Sestao se alinea con el alcalde de Treviso (Liga Norte Italiana) que declara que la solución al problema gitano consiste en eliminar a los niños gitanos cuando nacen. Porque ¿qué otra cosa es condenar a las familias gitanas a no poder llevar a sus hijos a las escuelas e impedir su entrada en los hospitales? El alcalde de Sestao niega a las familias gitanas rumanas la posibilidad de empadronarse en el municipio con lo que les impide, entre otras cosas, escolarizar a sus hijos o acudir a la sanidad pública. Incluso el Defensor del Pueblo Vasco, el Ararteko, había pedido al Ayuntamiento de Sestao que dejara de realizar esta práctica, que además es ilegal.

De hecho, durante la reunión en la que fueron grabadas estas declaraciones, una persona preguntó al alcalde por la posible ilegalidad de estas actuaciones, a lo que él contestó: “Yo incumplo la ley, todos los días, a todas horas”.

¡¡Y pensar, Señor, que el animal de José Bergara, alcalde de Sestao, había llegado a ser director de Igualdad y Derechos Humanos en la Diputación de Vizcaya!!

Ahora sí, por higiene política, por la defensa y dignidad de los ciudadanos de Sestao que no merecen ser representados por este sujeto, por el buen nombre del PNV, los gitanos y los gadchés que confían en la Unión Romani levantamos nuestra voz para decirle a este impresentable alcalde que desparezca de la vida política de Euskadi.

 

Juan de Dios Ramírez-Heredia

Presidente de Unión Romani

Vicepresidente de Unión Romani Internacional

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