El Primer Ministro irlandés, Enda Kenny, ha pedido disculpas a dos familias gitanas rumanas por retirarles, de manera temporal, a sus hijos por ser rubios y tener los ojos azules. La declaración del primer ministro en el parlamento se produjo en el momento en que el gobierno publicó un informe de 134 páginas sobre la retirada de un niño de 2 años y de una niña de 7 años, en octubre del 2013. El ministro de Justicia, Frances Fitzgerald, también se reunió con las dos familias en privado.

El informe de la defensora de los derechos del niño irlandesa, Emily Logan, determinó que la policía no tenía pruebas sólidas para justificar la retirada de cualquiera de los niños por parte de los servicios de acogida. Logan llegó a la conclusión de que las acciones de la policía vinieron impulsadas por los prejuicios, la ignorancia y por el frenesí de los medios de comunicación europeos sobre el presunto secuestro de una niña de pelo rubio por parte de una familia gitana en Grecia. El caso griego también resultó ser una falsa alarma.

(Associated Press)