Creada en 1999, Roma Virtual Network celebrará el 19 de julio de este año su decimoquinto aniversario ofreciendo unos servicios de gran calidad en las áreas de la comunicación, la información y la educación.

Un excelente momento para una reflexión personal. En 20 años, conocí a muchos gitanos: pintores, escritores, estudiosos, cineastas y a muchos, muchos músicos. La mayoría de ellos también son activistas en pro de los derechos de los gitanos y luchan por lo que usualmente se describe como “un estado de derecho”, que debería pasar a denominarse un mundo constitucional.

Los derechos fundamentales son un problema de fronteras. Mientras que todas las crisis a las que nos enfrentamos hoy en día, ya sean económicas, financieras o ecológicas, se perciben como asuntos globales, seguimos considerando las violaciones de los derechos como enfermedades nacionales, como si fuera el fracaso de estados aislados. ¡Eso es algo sin sentido! Los estados que están abiertos al comercio, al cambio climático o a la contaminación, también están automáticamente abiertos a los derechos humanos. En el pasado teníamos costumbres para defender la ley, hoy en día contamos con los activistas de derechos humanos que revisan nuestro “equipaje” y nos dicen qué podemos quedarnos y qué debemos desechar.

No son policías, son básicamente informantes, que nos recuerdan los tratados comunes, las violaciones de los derechos, las promesas rotas y la doble moral. Nos mantienen informados a diario. Cuando Valery Novoselsky fundó Roma Virtual Network, era un hombre joven y formado, de 29 años. Quince años más tarde, su red contiene 33 listas de correo electrónico en 20 idiomas. Con aproximadamente 11.000 direcciones de correo electrónico, es la mayor red rromà del mundo entero. Es un gran logro, pero no puedo evitar añadir unas tristes palabras a mis más sinceras felicitaciones. ¿Somos plenamente conscientes de que Valery Novoselsky sacrificó su juventud y su vida familiar para construir la red? La RVN es extremadamente valiosa para los estudiosos, estudiantes, periodistas, organizaciones no gubernamentales, diplomáticos, políticos y periodistas. Todos tienen razones para agradecer la ayuda económica prestada por la Open Society Roma Initiatives, que permitió que Valery continuara con su trabajo. Pero, ¿qué sería hoy en día esta red sin el incansable trabajo del propio editor? Por eso, espero y deseo que en los próximos años, Valery disponga de tiempo para sí mismo, para relajarse y disfrutar del lema y la sabiduría gitanos del carpe diem. Sería algo más que merecido.

(La autora es escritora y poeta; ex eurodiputada y creadora de la Iniciativa Mundial de Artistas “Khetanes”)