La Comisión Europea anunció recientemente que sancionará a la República Checa si no cambia esta práctica que ya fue declarada ilegal hace siete años por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos

Varias organizaciones internacionales han hecho un llamamiento conjunto a la República Checa para que el sistema educativo checo deje de segregar a los niños gitanos. Las declaraciones llegan tras el anuncio de la Comisión Europea de que sancionará a este país por separar a los alumnos rromà.

Las ONG Amnistía Internacional, European Roma Rights Centre, Open Society Fund Praga, Open Society Justice Initiative, Liga por los Derechos Humanos, IQ Roma Servis y Life Together, creen que después de que hayan pasado siete años desde que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos determinó que la República Checa violaba la Convención Europea de Derechos Humanos con respecto a la discriminación ilegal de los alumnos gitanos en el sistema educativo checo “estas violaciones todavía no se han solventado y los alumnos gitanos siguen sufriendo segregación en la educación en todo el país. El 25 de septiembre, en respuesta a la incapacidad para abordar esta situación, la Comisión Europea puso en marcha un procedimiento de infracción en virtud de la Directiva sobre igualdad racial contra la República Checa, que podría dar lugar a sanciones económicas significativas”, firman en el comunicado conjunto.

“El caso de Derechos Humanos y otros contra la República Checa trataba sobre un grupo de jóvenes rromà de Ostrava a los que se inscribió en una escuela primaria especial, una escuela para niños con ‘discapacidad mental leve’. El Tribunal de Justicia Europeo dictaminó que la asignación de niños y niñas gitanos en las escuelas para alumnos con discapacidad mental leve era una discriminación ilegal” recuerdan, y alertan de que “sin embargo, de acuerdo con los últimos hallazgos de la Inspección Escolar Checa y del Defensor del Pueblo, los niños y niñas gitanos todavía representan por lo menos una tercera parte del total de alumnos que acuden a las escuelas prácticas (anteriormente denominadas especiales)”.

En su misiva, las organizaciones señalan que “muchos niños y niñas gitanos también son educados por separado en las escuelas primarias generales. En muchas ciudades y pueblos hay escuelas conocidas como ‘escuelas para gitanos’, que se componen casi exclusivamente de alumnos rromà, mientras que a unos pocos cientos de metros de distancia suele haber otras escuelas a las que asisten alumnos, la gran mayoría de los cuales no son gitanos. La metodología de las ‘escuelas gitanas’ suele ser menos exigente y se centra en las habilidades prácticas, a expensas de las capacidades y conocimientos académicos básicos necesarios para continuar con el siguiente nivel de la educación secundaria. Aunque algunos directores intentan proporcionarle una educación de calidad, tanto a los niños gitanos, como a los no gitanos, a menudo se enfrentan a problemas insuperables debido a la falta de recursos y de apoyo por parte del Gobierno y de las autoridades locales”, valoran.

Asimismo, afirman en el comunicado que “esta situación constituye una violación no sólo de la legislación checa contra la discriminación, sino también de los derechos humanos internacionales y de las leyes de la UE. Somos conscientes de la actual reforma de la Ley del Sistema Escolar Checo, que tiene por objeto la inclusión de los alumnos con necesidades educativas especiales en los centros ordinarios. Sin embargo, esta reforma no aborda la existencia de escuelas que segregan por pertenencia étnica -una omisión fundamental que perpetuará el incumplimiento de las obligaciones legales de la República Checa”.

Para finalizar, hacen un llamamiento al gobierno checo “para que aproveche el procedimiento de infracción como una oportunidad para resolver eficazmente la persistencia de esta situación ilegal y acabar con la discriminación racial que sufren los niños gitanos en el sistema educativo del país”.

(Unión Romaní)