24.02.2015 - OPINIÓN

´Gipsy Kings´, despilfarro de incultura

Por José Vega de los Reyes

Parecía que ya íbamos a tener bastante con dos temporadas de ‘Palabra de Gitano’, pero no, Mediaset ha vuelto a la carga con un ´reality´, ahora volcado en cuatro familias gitanas; las cuatro que reinan en sus ámbitos, según dicen. De hecho, la empresa televisiva ha vuelto a poner su mirada en la etnia gitana, para reabrir aún más viejos y nuevos fantasmas del racismo y el antigitanismo.

Utilizando el mismo formato que su predecesor televisivo, ‘Gipsy Kings’ viene de la mano de La Competencia, una productora que ha hecho programas con un compromiso tan social y tan interesante -entiéndase la ironía- como: ‘Granjero busca esposa’, ‘Supervivientes’ o el docu-show ‘Palabra de Gitano’, del que incluso tienen el atrevimiento de justificarlo en su propio medio web, vanagloriándose de ser “la primera productora del mundo en acceder a algunos de los ritos más ancestrales y secretos de este pueblo”.

Atrás entonces quedarán otros reportajes e incluso estudios sociológicos o antropológicos que versan sobre el sentir, la tradición y las referencias culturales del pueblo romá. Eso sí, quedará para la historia como la primera productora en instaurar el “roneo” como una transición o etapa que pasan los jóvenes gitanos o gitanas o en promocionar la supuesta “ley gitana” como una verdad absoluta. Lástima de no haber tenido ganas de hacer algo en condiciones.

Es de recibo incidir en la idea de que Cuatro, o Mediaset, que la misma chabacanería es, están entrando en una espiral peligrosa. Famosos, gitanos, musulmanes, mujeres, hombres, jóvenes, madres, padres, homosexuales y en definitiva, todos los grupos que conforman nuestra sociedad y especialmente los más vulnerables, están siendo tratados bajo un prisma donde lo más importante es el morbo, rozando en muchos casos la delgada franja que separa la sorna de la burla, o lo que es lo mismo, azotando a la riqueza humana, que no es otra que el contacto entre personas de distintas culturas, la interculturalidad, ¿dónde quedaron los escrúpulos entonces? Me pregunto y no encuentro ni un atisbo de responsabilidad en estas empresas, empecinadas en una audiencia que corta de luces, se traga unos formatos guionizados, sesgados y alejados de la realidad.

Y sí, cada una de estas personas que se prestan a ser grabados por unos cuantos miles de euros también merecen su repulsa. Máxime cuando han “vendido” a los grupos que representan, en este caso los gitanos, aunque sería extensible al resto de la sociedad, pero hay que apelar a la responsabilidad y celo profesional de una empresa como es La Competencia, que ha encontrado un filón en estos formatos. Formatos por cierto que han sido denunciados ante los tribunales, los mismos que han dado un tirón de orejas a esta empresa y por eso, en vez de vendernos una tercera edición de Palabra de Gitano, la cual fue duramente criticada por ser una falacia, incitadora al odio, aparece este nuevo show, con un estilo grotesco que ha pretendido en este primer capítulo emitido en prime time demostrarnos ¡algo que no sabíamos hasta ahora! -síganme los irónicos-  que el dinero, cuando se tiene y sobra, se gasta y se vuelve a despilfarrar. Más o menos lo mismo que ha hecho Mediaset con ‘Granjero busca esposa’, ‘Palabra de Gitano’ y ahora con ‘Gipsy Kings’, ganar dinero a toda costa y despilfarrar. Lástima que no despilfarren cultura. Con la de cosas que se podrían hacer.

 

(José Vega de los Reyes es trabajador social,  activista pro Derechos Humanos, responsable del área de educación de la Federación Andaluza de Mujeres Gitanas y colaborador del programa Andalucía Cinco Culturas)

 

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