El presidente del Partido Popular, Luis María Beamonte, se ha reunido con la Federación de Asociaciones Gitanas de Aragón (FAGA), con objeto de escuchar las peticiones de este colectivo. La presidenta, Pilar Clavería, ha resaltado que necesitan ‘apoyo político porque hay mucho racismo y discriminación hacia los gitanos’.
Tanto Beamonte como Clavería han recordado los acuerdos que ya alcanzaron cuando el partido gobernaba la Comunidad ‘y queremos repetirlo, no quedarnos en una subvención y ya está’, ha comunicado Clavería. Entre las carencias que sufre el pueblo gitano, se encuentran sobre todo las vinculadas a la formación y educación, como ha enfatizado la presidenta, aunque también la vivienda: ‘En Tauste hemos preparado casas modulares para que Menores no les quite los niños a los que no tienen ni casa ni trabajo’. Asegura que la crisis se ha llevado por delante muchas familias que han sufrido desahucios y que además han visto reducidas sus posibilidades de sustentarse con el comercio ambulante.
‘Queremos avanzar en integración y escuchar cuantas demandas tenga el colectivo’, asegura Beamonte, para quien se debe tomar nota de la realidad social con anterioridad a la formación de un Gobierno. ‘Yo creo en las políticas reales y no en la política-ficción, y si no se les escucha, no se puede tener una visión real de lo que ocurre’, explica. En este sentido, el abanico de actuaciones es muy amplio y no se reduce a una subvención puntual: ‘Se trata de ayudar a los que más lo necesitan sabiendo dónde invertimos y cómo lo hacemos y los mejores conocedores de su situación son los miembros de la propia Federación’.
Clavería ha pedido ‘respeto a los gitanos, que somos españoles y zaragozanos y tenemos derechos y obligaciones’. También ha señalado que es prioritario para ellos establecer contactos con los políticos. ‘Desde aquí los preparamos con un oficio, pero luego no encuentran trabajo por el racismo tan fuerte que hay, por eso necesitamos buenos políticos que les hablen a las empresas y les digan que tienen que contratar gitanos, nos lo merecemos’, concluye Clavería.