Una niña ucrania gitana delante del Kyiv Hall. Las personas gitanas halladas entre Korczowa y Przemyśl son, principalmente, mujeres y niños. La ley marcial, como sabemos, obliga en la mayoría de los casos a los hombres a quedarse en Ucrania. / Foto: Giacomo Sini
El diario EL PAIS ha publicado el pasado día 8 de junio un interesante reportaje de Giacomo Sini donde se pone de manifiesto las durísimas condiciones de vida por las que atraviesan los refugiados ucranianos. Si siempre se ha dicho que una imagen vale más que mil palabras, damos fe de ello con lo que ahora reproducimos.
Monika Szewczyk, Tomasz Kosiek e Ignacy Jozwiak, en un restaurante de Przmysl, escuchando a Elizbieta Mirga-Wójtowicz, una investigadora polaca gitana (centro), mientras planean actividades para apoyar a la comunidad gitana que huye de Ucrania por la frontera polaca. Los cuatro trabajan en el Centro de Investigación de la Migración, perteneciente a la Universidad de Varsovia, y colaboran con el Instituto Europeo de Arte y Cultura Gitana (ERIAC), con sede en Berlín. / Foto: Giacomo Sini (El País)
Elzbieta y Tomasz caminan por la noche entre los autobuses del centro comercial de Tesco, en Przemyśl, cerca de la frontera entre Polonia y Ucrania. El centro se ha convertido en punto de acogida inicial para los refugiados que huyen de Ucrania. Los autobuses se dirigen a los diversos destinos de Europa en los que recibirán a los refugiados ucranios. Detrás, Monica camina con Gnako, un activista polaco que llegó a la frontera para colaborar con las actividades de los investigadores. / Foto: Giacomo Sini (El País)
Monica es investigadora polaca gitana en el Centro de Investigación de la Migración, perteneciente a la Universidad de Varsovia. Tras ella, Artur, joven refugiado ucranio gitano, espera delante del Kyiv Hall, cercano a Korczowa, a salir en autobús con su esposa e hijos hacia Alemania. / Foto: Giacomo Sini (El País)
Monica abraza a una joven gitana, refugiada del este de Ucrania, que está a punto de partir hacia Alemania. “A los gitanos los han expulsado de las estaciones de tren, les han negado ayuda, comida, acomodo, y los han trasladado de un sitio a otro. Muchos han regresado a Polonia”, denuncian los investigadores del Centro de Investigación de la Migración, de la Universidad de Varsovia. / Foto: Giacomo Sini (El País)
Una zona del Kyiv Hall en la que duermen los gitanos ucranios. El centro comercial está cerca del pueblo de Korczowa, en la frontera entre Polonia y Ucrania, que se ha convertido en punto de acogida inicial para este colectivo. / Foto: Giacomo Sini (El País)