Cada 5 de noviembre se conmemora el Día Mundial de la Lengua Romaní, una fecha proclamada en 2015 por la UNESCO con el fin de promover la preservación cultural de esta lengua, fomentando su desarrollo y estudio. Este día es una oportunidad para que los Estados Miembros y la comunidad internacional reafirmen su compromiso con la defensa y el reconocimiento de la lengua y cultura del Pueblo Romaní, una de las comunidades históricas más grandes de Europa.
La elección del 5 de noviembre no es casual. Esta fecha se inspiró en el Congreso Internacional de la Lengua Romaní celebrado en Zagreb del 3 al 5 de noviembre de 2009. Este evento reunió a lingüistas, romólogos, investigadores, defensores y activistas de toda Europa, además de líderes y representantes de la sociedad civil gitana más proactiva. La iniciativa del congreso fue impulsada por la Union Romaní Croata «Kali Sara», con sede en Zagreb, que desde sus comienzos ha liderado el movimiento internacional en la defensa y promoción de la lengua.
Por ello, el 5 de noviembre de 2008 con motivo de la publicación del primer diccionario romaní-croata, la Alianza impulsó la firma de la Carta de la Romaní Ćhib, el manifiesto fue suscrito por 157 personas a nivel internacional, dando lugar a que se celebrase por primera vez el Día Mundial de la Lengua Romaní. Posteriormente, en el 2015, la Alianza consiguió que la UNESCO declarara oficialmente la lengua romaní como parte del patrimonio cultural mundial.