“En el registro civil figura como María Antonia, pero ante la pila bautismal su familia decidió que sólo se dirigirían a ella como Ostalinda. En romanó significa la más elevada, lo que alude directamente a la Virgen María”. Mientras preparo esta entrevista (con mucho cariño además, por el aprecio que profeso a nuestros dos protagonistas) me encuentro este párrafo en alusión a Ostalinda Suárez (Zafra, 1980) en una publicación en la que se da a conocer a 50 Mujeres Gitanas de la Sociedad Española. Y me conforta conocer, participar de alguna manera, en ese apego a la cultura y a la tradición que tiene este pueblo, mientras gitanos como ella y el Chef David Salazar (Zafra, 1978) gerente del Restaurante Manro echan abajo estereotipos y creencias obsoletas que no corresponden ya, en su mayoría, con el día a día de este pueblo. Como prueba, el hecho de que Ostalinda sea, precisamente, la primera gitana licenciada en música con especialidad en flauta travesera en el panorama musical europeo. Ella será, la que junto a David Salazar, gestione la tradicional Caseta de los Gitanos en esta 565 edición de la Feria Internacional Ganadera de San Miguel, del 27 de septiembre al 3 de octubre. “Un buen ambiente, una cocina excepcional y como no podía ser de otra manera, mucho flamenco”, nos responde Suárez. Payos y gitanos, estamos invitados.
¿Caseta ‘de los gitanos’ o caseta gitana?
Caseta gitana. Caseta hecha por gitanos, pero abierta a todo el mundo. No todo el mundo conoce a los gitanos, la cara buena, bonita, de este pueblo. Queremos abrir puertas, fomentar la convivencia en torno al flamenco, con ánimo de que todo el mundo pueda disfrutar de la caseta y de la feria, sin necesidad de tener que hacer distinciones entre payos gitanos, chinos o negros. Se acabó, eso se acabó.
El reto no es baladí…
Es cierto que el desconocimiento hace que mucha gente pase de largo de la Caseta Gitana y se pregunte: “a ver qué me van a hacer”, pero les respondería: ¿Y qué les vamos a hacer? David y yo lo tenemos claro: no queremos promocionar nuestra profesión sino promocionar al pueblo gitano.
También por el reto que supone gestionar una caseta tan emblemática, ¿no?
Sí, sí que lo es. Quitando en Andalucía, hay pocas ferias con casetas dedicadas a la cultura gitana donde todo el mundo pueda compartir nuestra cultura, gastronomía, color, nuestra juerga…, como una manera profesional de ofrecer calidad y fiesta. Nosotros tenemos ideas frescas, fuerza e ilusión en lo que es, para muchas familias gitanas, una tradición: pasar el día en la Feria de Zafra en esta caseta. Yo recuerdo de mocita prepararme para este mes de octubre donde además de Zafra hay otros eventos muy emblemáticos como la Feria Chica de Mérida o la Romería de la Virgen de los Remedios de Fregenal.
¿Cómo surge esta caseta?, ¿cuáles son sus orígenes y los que la hicieron posible?
La participación de los gitanos está en el origen de la Feria de San Miguel de Zafra y en otras importantes ferias de ganado. El pueblo gitano, no supo adaptarse a los cambios económicos y sociales que tan profundamente afectaron al campo extremeño desde mediados del siglo XX. Durante décadas perdimos el protagonismo de antaño, y pasamos a un anonimato que todos los gitanos vivimos con gran pesar. Hoy volvemos a hacer presente la cultura gitana en la sociedad de la que formamos parte. En 1992 cuando se inauguró la Feria Internacional Ganadera no contaron con los gitanos. Ante este suceso, la asociación gitana de Zafra puso en movimiento la creación de la caseta, para la participación del pueblo gitano con la que comienza una nueva etapa. Ese año se rescata el tradicional Rodeo y se realiza un acto de homenaje y reconocimiento al pueblo gitano extremeño por su aportación al acervo cultural de la región, y al desarrollo de la feria. Queremos seguir estando en la historia de la Feria de San Miguel. Todo esto impulsado por la Federación de Asociaciones Gitanas Extremeñas (Fagex), y el apoyo de las familias gitanas de Zafra.
¿Qué podremos encontrar los aficionados?
Tendremos a grandes artistas durante los días de feria: Mara Rey, Los Mellis de Huelva, Celeste Montes…, intentamos ofrecer música gitana de calidad para que, todo el que quiera, pueda disfrutar de la feria a nuestra manera. Siempre pensando en satisfacer a todos los públicos desde un punto de vista flamenco.
El chef David Salazar llevará la gastronomía, ¿qué podremos degustar?
Tendremos platos con sabor, con olor, con identidad, con música… con sentimiento. En definitiva, hemos unido el arte de los sentidos con la música y la gastronomía en un mismo espacio, para hacer disfrutar a todo aquel que quiera bucear en nuestra cultura.
El domingo podremos disfrutar de una comida de convivencia. ¿La integración no está normalizada?
Los encuentros entre flamencos siempre son necesarios por el simple hecho de disfrutar de nuestro arte, de nuestra amistad. No es una convivencia de payos y gitanos, es una convivencia flamenca donde queremos compartir un día de flamenco. No se trata de integración, se trata de compartir, de nutrirse, de pasar una jornada juntos todos los flamencos, sin necesidad de distinguir entre payos y gitanos.
¿Qué aportan los gitanos a los payos y viceversa?
Se aportan humanidad, cultura, filosofía, etcétera, todo lo que cualquier ser humano aporta a otro. Estamos muy emocionados y expectantes ante este proyecto de unión entre dos formas de arte, ya que pretendemos abrir una ventana al mundo para mostrar la cultura de nuestro pueblo.