‘Lamentablemente, durante mucho tiempo los romaníes han sufrido con frecuencia el racismo y la discriminación que los han empujado a los márgenes de la sociedad’, dijo Zannier al señalar que ‘en el panorama político actual su posición sigue siendo muy vulnerable’.
De acuerdo con un informe anual, publicado por la Agencia de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea en junio, en 2018 se registraron otros casos de discriminación de los romaníes en el acceso al empleo, la educación, la asistencia sanitaria y la vivienda, mientras el antigitanismo sigue representando un grave obstáculo para la integración del pueblo romaní en la comunidad internacional.
El 8 de abril, Día Internacional del Pueblo Gitano, el relator especial de la ONU sobre las minorías Fernand de Varennes declaró que los romaníes son víctimas de expresiones de odio, intolerancia y violencia y llamó a la comunidad internacional a promover los derechos de ese colectivo.