La imagen que ofrece esta fotografía ni en sueños la habrían podido imaginar nuestros padres, nuestros abuelos, nuestros antepasados.
En 1425 el rey Alfonso V el magnánimo concedió permiso a la primera caravana de gitanos que llego a España para que fueran en peregrinación a Santiago de Compostela.
Ahí empezó una historia de turbulencias en la que siempre nos tocó llevar la peor parte. Han tenido que pasar casi 600 años para que el día de hoy, 21 de mayo de 2019, se inscriba con letras indelebles en la historia de nuestro pueblo y en la historia de España.
Primero fue Silvia y ahora vosotros Ismael, Beatriz, Sara y Juan José inscribís vuestros nombres en la institución más importante en democracia dónde se fraguan los destinos de todos los españoles.
Por eso hoy, desde la lejanía de aquel 15 de junio de 1977 en que tuve el honor de pisar las alfombras que hoy estáis pisando vosotros me siento orgulloso, feliz y esperanzado con que a partir de ahora el futuro inmediato para nuestro pueblo y para todos los españoles será, al menos, un poquito mejor.
