Rut León Gabarri, gitana lucense: “De niña, nunca me invitaban a los cumpleaños”

808

“Nosotros sufrimos el antigitanismo, que es una especie de racismo específico de la comunidad gitana en el que nos ven a todos como delincuentes y a través del cual se critican nuestras costumbres y nuestro color de la piel”.

“El racismo se sufre los 365 días del año y yo lo sufrí toda la vida. Cuando era pequeña, no quería ir al colegio porque no tenía amigos y me decían que tenía piojos y que era una ladrona. Recuerdo que había niños que repartían las invitaciones para los cumpleaños y a mí nunca me la daban. En el instituto, había una niña que siempre me pegaba antes de entrar en clase y en los recreos. Y, más tarde, cuando empecé a trabajar, limpiando en una casa, me dejaron dinero tirado para ponerme a prueba por si me lo quedaba, y en un supermercado, de cajera, me indicaron que por esa caja no podía atender a ningún gitano”.

“Fui a muchas entrevistas laborales en las que me rechazaron por ser gitana pese a tener un currículo mejor y ya me dijeron que no al verme entrar. Para alquilar, también me pasó lo mismo”.“Hay gente que se dirige a mí y me dice: Entendes o galego?, tratándome como si fuese tonta o no fuese gallega. Hay algunos que todavía piensan que, por ser gitanos, no somos españoles”. “Y también hay racismo cuando vemos que, a solo 7 kilómetros de Lugo, está el Tercer Mundo en O Carqueixo, donde malviven varias familias sin luz ni agua”.

Leer más: El Progreso